Trabajar en asistencia en carretera no debería ser una actividad peligrosa. Se espera que las novedades que ha traído el Real Decreto de 2021 contribuyan a la seguridad de los conductores de grúas.

El 16 de marzo de 2021, el Gobierno aprobó el RD 159/2021, que afectaba directamente al sector del auxilio en carretera. La novedad legislativa pretendía reforzar la seguridad de todas las personas que trabajan en las carreteras, conduciendo grúas y realizando rescates de vehículos. Las cifras de mortalidad registradas en los últimos años eran, siguen siendo, motivo de preocupación.

Entre las novedades estaban la creación de un Registro Estatal de Auxilio en Vías Públicas (REAV), dependiente de la Jefatura Central de Tráfico, así como la identificación de los vehículos con una nueva señal, la V-24 (con señal acústica opcional tritonal discontinua, tal y como explicamos aquí en su momento). Exclusiva para grúas. En realidad es una versión ampliada de la señal de “auxilio” de siempre, pero con más datos.

Identificando los vehículos de auxilio en carretera

Tanto las empresas de transportistas de auxilio en vías públicas como sus vehículos deben estar inscritas en el REAV -que empezó a funcionar el mes de junio pasado-, para realizar una labor que quedará así más regulada. Recordemos que, como subsector dentro del transporte, el auxilio en carretera había reclamado, históricamente, su especificidad (de ahí el RD del Gobierno).

En cuanto a la señal V-24, se trata de una señal donde figura el número del registro del REAV de cada vehículo de rescate. Dicho número certifica a la empresa como una compañía que trabaja en el auxilio en vías públicas. La V-24 consiste en dos placas (compuestas por planchas de aluminio, resistentes y de superficie reflectante), que deben colocarse en el lateral izquierdo, así como en la parte frontal o posterior. En el BOE correspondiente se explicaron sus características y medidas. El plazo para ir instalando la V-24 tiene una fecha: 22 de diciembre.

Las otras dos señales que debe llevar una grúa son la V-2 y la V-23. La primera es una señal luminosa de color amarillo, acompañada de unas placas retrorreflectantes con franjas rojas y blancas; la segunda, una señal reflectante que marca todo el contorno del vehículo y hace que sea visible en condiciones de baja visibilidad.