Trabajar en asistencia en carretera implica conocer el funcionamiento de las grandes flotas, que sin duda son el instrumento más útil para desplegar una labor que puede ir de lo sencillo a lo complejo. ¡Depende de la circunstancia!

Un servicio de grúa profesional, además de la pericia de sus operadores de auxilio en carretera, debe contar con una buena flota. Los vehículos de auxilio en carretera son diversos y están pensados para las diferentes situaciones a las que los profesionales se enfrentan en su día a día. Accidentes, rescates, desplazamientos, traslados…

No es lo mismo recoger un turismo averiado en plena ciudad que hacerlo en la autovía. Las dimensiones de un vehículo pueden acarrear un rescate de proporciones gigantescas, según donde se encuentre el propio vehículo. Se pueden rescatar toda clase de vehículos, así como ayudarles en su desplazamiento (autobuses, camiones, embarcaciones de distinto tipo…).

Remolques, cabestrantes, plataformas o góndolas, entre otros, son los elementos que encontraremos en estos vehículos especiales. Aunque la diversificación es una realidad, precisamente por la cantidad de vehículos existentes que hay en el mercado, estas grúas serían las esenciales:

1. Grúas de plataforma, conocidas también como grúas con cama plana o camilla, son las más comunes en las carreteras de cualquier país. La plataforma, que se inclina mecánicamente, sirve para llevar vehículos hasta 2.400 kilogramos, y está hecha de acero, por lo general. Cuentan con anclajes de seguridad.
2. Grúas de gancho de remolque y cadenas, fueron históricamente las primeras en aparecer en escena, si bien en la actualidad han quedado relegadas para remolcar, sobre todo, vehículos comerciales y tractocamiones.
3. Grúas de arrastre, son las que tienen el típico yugo de metal que se engancha debajo de las ruedas del vehículo. Los operadores de auxilio en carretera pueden utilizarlas en aparcamientos cerrados gracias a la capacidad de maniobrabilidad que ofrecen. Transportan muy bien vehículos siniestrados, aunque pueden verse también en autovías rescatando coches averiados.
4. Grúas tipo percha o tope, pueden auxiliar vehículos de hasta 1.800 kilogramos, gracias a la elevación hidráulica. Mediante un sistema de carritos consiguen trasladar, igualmente, vehículos muy dañados tras un siniestro.
5. Grúas para vehículos pesados, están diseñadas para trasladar o remolcar -en caso de accidente- vehículos de grandes dimensiones, hasta 12.000 kilogramos. En este caso, hablamos de servicios altamente delicados, donde el porte de los vehículos debe realizarse de la manera más estable posible.